El diputado perredista presidente de la comisión legislativa del Migrante, Grupos Vulnerables y Gestión Social, Eddy Trujillo López, señaló de manera directa y contundente a SAGARPA, de estar robando al campesinado nayarita, ya que la entrega de recursos derivados de los distintos programas sociales, sencillamente no los entrega, lo que provoca que el campo se esté empobreciendo y el campesinado viva totalmente endeudado.
Refirió que pese a que el campesino vive regateando un peso, el mínimo apoyo y las autoridades competentes en apoyar al campo, los ignoran y prefieren “jinetear” esos recursos antes que entregarlos.
Detalló que se ha discutido en todo momento lo referente a ASERCA, que es el subsidio de los dos pesos por kilo de frijol o de los 2 mil pesos por tonelada de este grano, donde ya se está a punto de cosechar y hay por ahí algunos que ya están trabajando para el nuevo ciclo agrícola de frijol en algunas comunidades del municipio de Santiago, y es hora, de que no se les ha entregado el recurso del ciclo anterior, lo que habla de la apatía y valemadrismo que impera en esas dependencias que están dirigidas a apoyar al campo y al campesinado.
Pese a que ya estaba todo listo para dar ese apoyo para la variedad de los claros y se estaba viendo para los negros, no se ha dado nada, ya que estos funcionarios quieren ver convertidos a los campesinos en pedigüeños, cuando lo único que hacen es exigir lo que es de ellos y que son precisamente esos funcionarios de SAGARPA, quienes la hacen o se convierten en rateros.
En el caso del seguro catastrófico dijo que quedó incompleto, no se les entregó al total de los frijoleros, a los productores de mango también se les pago a una parte muy mínima, así como a los cafetaleros y a los horticultores también no se les pagó ese seguro catastróficos.
No es posible, dijo Eddy Trujillo López, que hasta la misma Nacional Financiera para evadir su responsabilidad y explicar motivos por los que no pagó ese seguro, diga que no hay dinero, lo único que estamos viendo, es una serie de anuncios de programas sociales de apoyo al campo desde la misma Presidencia de México, pero en su aplicación, sencillamente no funcionan porque no hay dinero, eso es una rotunda burla para el campesinado, que les siguen jugando el dedo en la boca y se burlan de sus necesidades.
Las necesidades y problemas del campo día a día crecen por la voracidad de los propios funcionarios que especulan con los recursos dirigidos al campo y que prefieren que vayan a parar a sus bolsillos.
No es posible que ante las inclemencias y graves problemas que enfrentó el ciclo agrícola pasado, solo se le hayan aprobado 7 millones de pesos para el seguro catastróficos, lo que representó también una burla porque se les dio únicamente mil 500 pesos a un grupo muy mínimo, mientras que el grueso fue el pago por hectárea siniestrada de 500 a 700 pesos y en muchos de los casos sencillamente no se pudo pagar, porque ya no alcanzó el dinero, pero ante esas cantidades, que no cubren ni siquiera el agua que llevan para tomar, mucho menos cubrir los gastos del cultivo o de la misma semilla, solo refleja la apatía y el valemadrismo que tiene el gobierno por no apoyar al campo y mucho menos a los campesinos, “ los problemas del campo como de su gente para nada interesa al gobierno, se habla mucho de honestidad y transparencia, y es lo primero que les falta a esos funcionarios, que de manera cínica se burlan de ellos”.
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