Derivado de la serie de acontecimientos que se han estado dando en casi todo el país y por supuesto que Nayarit, no es la excepción, en cuanto a la atención de calidad, calidez y sobre todo oportuna a las mujeres embarazadas, durante y después del parto, donde por negligencia de los médicos han muerto mujeres, en Nayarit, los diputados y diputadas elevan la voz, y ahora a través de leyes, estarán castigando a quienes nieguen o den atención errónea a estas mujeres.
Con la aprobación unánime del decreto que tiene por objeto adicionar disposiciones normativas a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para el estado de Nayarit, en materia obstétrica, nuestro estado se suma a los 11 que ya cuentan con ella, por lo que ahora existen solo 12 entidades federativas que protegen a la mujer embarazada y definen la violencia obstétrica.
Entre las entidades que cuentan ya con esta ley a favor de las mujeres embarazadas, están Nayarit, Quinta Roo, San Luis Potosí, Chiapas, Guanajuato, Veracruz, Colima, Durango, Chihuahua, Hidalgo, Tamaulipas y el Estado de México.
Y aunque los diputados aprobaron dicha reglamentación, en donde se exige que toda mujer embarazada deba de recibir una atención médica de calidad, respetuosa y atenta, es algo incompresible, debido a que estos aspectos deben de cumplirse en toda atención médica.
Pese a que ahora se estipulan mecanismos legales para castigar a los médicos por no dar un trato adecuado a las mujeres durante el embarazo, parto y después del parto, ahora solo resta que se cumplimenten dichas sanciones.
De acuerdo a lo aprobado por los legisladores, definen a la violencia obstétrica, como un tipo de violación a los derechos humanos y reproductivos de las mujeres que incluye los derechos a la igualdad, a la no discriminación, a la información, a la integridad, a la salud y a la autonomía reproductiva; este tipo de violencia, se genera en el ámbito de la atención del embarazo, parto y después del parto en los servicios de salud ya sean públicos o privados.
De igual forma, se precisa que la violencia obstétrica puede darse desde regaños, burlas, insultos, amenazas, humillaciones, manipulación de la información, negación al tratamiento, aplazamiento de la atención médica urgente, indiferencia frente a sus solicitudes sin ningún respeto, o el manejo del dolor durante el trabajo de parto como castigo, entre otras situaciones que ponen en riesgo la salud y vida de la mujer.
De acuerdo a los mencionado por el presidente de la Comisión de Gobierno Legislativo y líder de la fracción parlamentaria del PRI, el diputado Jorge Humberto Segura López, el haber incorporado la violencia obstétrica a la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, permitirá que estén más protegidas y sean respetados sus derechos humanos, ya que dichas reformas buscan la atención digna y oportuna de las mujeres que estén embarazadas, o en labores de parto, en tiempo de recuperación, por lo que toda mujer embarazada tendrá en la entidad, totalmente garantizada la atención médica obstétrica, tanto en las instituciones públicas como privadas, por lo que el llamado a las mujeres, es denunciar de todo aquél médico o institución de salud, que les niegue, les preste de manera tardía, grosera o discriminatoria la atención, para que se proceda a sancionarlos.
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