SIN SER LAMINEROS EN TRÁNSITO DEL ESTADO ENDEREZARON VEHÍCULOS CHUECOS, DICE FISCAL

Por: MARIO LUNA

 Toda una “lindura” es como se trabajaba en la Dirección de Tránsito y Transporte, donde el carro por más “chueco” que estuviera lo enderezaban y eso que sus titulares, no eran lamineros, pues carros robados, que habían participado en graves delitos, que se les había decomisado por traer drogas, que habían sido despojados con lujo de violencia y lo que se pudiera imaginar, en esta dependencia los regularizaban y los convertían en autos honestos.
Cabe destacar que de acuerdo a lo informado por el propio Fiscal General del Estado, Petronilo Díaz Ponce Medrano, dijo que se procederá de inmediato judicialmente contra aquellos ex funcionarios que participaron en esos hechos de corrupción, por lo que si en estas irregularidades se encuentra participación de la ex directora Patricia Betancourt Zepeda, se le acusará de más delitos.
Al preguntársele sobre si hay participación de Agustín Flores, titular de esa dependencia en el sexenio de Roberto Sandoval, no quiso decir nada, se limitó a decir que existen algunos ex funcionarios involucrados a quienes se les estará fincando responsabilidades penales, reservándose los nombres de estos para no entorpecer las investigaciones en curso.
El Fiscal General, especificó que las áreas de Tránsito y Transporte donde se encontraron mayores irregularidades fueron en la emisión de licencias de conducir y en la verificación vehicular, donde se tienen las pruebas suficientes para actuar en consecuencia.
Explicó que se daban licencias sin presentar identificaciones oficiales de quienes se les entregaban, expedientes incompletos, muchos de estos movimientos estaban a un mismo nombre o en un mismo domicilio, se les expedía licencias de conducir a personas que tienen años sin vivir en el estado porque radican en los Estados Unidos, en otros documentos se detectaron fotos que no correspondían a los nombres que ahí se mencionaban.
En el área de verificación vehicular se encontró es que se emplacaron vehículos remarcados en su serie y con facturas falsas, se autorizó por “alguien” que se legalizaran este tipo de vehículos, que muchos de ellos fueron robados con lujo de violencia, que habían participado en ilícitos graves o que se les había decomisado porque se les encontró transportando drogas, sin importar todo ello, se les entregaban sus tarjetas de circulación y placas nuevas, otro de las irregularidades fueron que se hacían descuentos no viables en los cobros que se hacían sin tener la autorización autorizada de la Secretaria de Finanzas.
La corrupción también salpicó a las oficinas centrales de informática que se encuentran en el anillo central de Palacio de Gobierno, de donde se hacían modificaciones de datos, encontrándose recibos oficiales que se entregaban pero que no correspondían en su folio a esa dependencia.