Al terminar la sesión pública ordinaria en el Congreso del Estado este jueves al diputado perredista, Luis Manuel Hernández Escobedo, se le vio un poco irritado. El legislador se molestó al momento de que un grupo de por lo menos diez personas le pidieron apoyo para comprar útiles escolares, leche para recién nacidos, medicinas, comida, entre otros.
Hernández Escobedo, al escuchar la petición en un tono de regaño les manifestó a los casi menesterosos que tiene muchos gastos y que ni dándoles cincuenta pesos a cada uno le ajustaría su cheque. Algunos de los que le pidieron la ayuda al representante popular le explicaron que carecen de dinero para sobrevivir porque no tienen trabajo, otros le dieron a conocer que con lo que ganan apenas pagan el pasaje de los camiones del transporte urbano y el legislador les insistió que el problema no se resuelve pidiendo limosna, sino generando empleos bien pagados.
La plática del diputado perredista y los pedigüeños tuvo una duración de aproximadamente diez minutos y quienes escucharon el sermón del parlamentario señalaron que Luis Hernández es muy codo porque al mes gana 150 mil pesos sin contar lo que recibe de la Universidad Autónoma de Nayarit.
Antes de despedirse de los limosneros Hernández Escobedo entregó doscientos pesos y pidió que lo repartieran entre tres personas y las demás se fueron sin nada.
Así mismo los amigos del diputado aseguraron que la mayoría de los que pidieron el apoyo viven de lo que reciben de los parlamentarios porque todos los días se les ve en sus oficinas inventando pretextos para recibir algo de dinero.
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