POR PERMITIR LA DERROTA DEL PRI, LA DIRIGENCIA ESTATAL DEL TRICOLOR QUE ENCABEZA ENRIQUE DÍAZ, TIENE QUE DEJAR EL CARGO, AFIRMAN DISIDENTES DEL PARTIDO

 Por: MARIO LUNA

 Uno de los más acérrimos autocríticos del PRI, Julio Mondragón Peña, ante as amenazas que hiciera el dirigente estatal de su partido, Enrique Díaz, al declarar que correrá a todos aquellos que han estado criticando y señalando actos antidemocráticos, así como una renovación en la dirigencia total del tricolor, le responde que su salida como dirigente no está a discusión ni haber si quiere o no, ya que se irá quiera o no y junto con él todo ese club de “Tobi” que ha conformado.

Señaló que esta dolorosa y cruel masacre que obtuvo el Revolucionario Institucional en los resultados electorales, fue precisamente porque desde tiempo atrás se denunció que se tenia un PRI, secuestrado, muy cerrado donde solo un reducido grupúsculo, que primero se apodero de las delegaciones federales, luego de la magistratura, posterior las candidaturas, luego de las plurinominales y eso le dio en la madre al partido, dijo el denunciante.

Es la peor votación que ha tenido el partido en toda su historia en la entidad, pero además se tiene la peor dirigencia que se haya tenido en todos estos años del tricolor, por ello eso no le queda andar exigiendo calidad moral cuando él es el primer que no la tiene.

 “El peor dirigente que ha tenido el PRI se llama Enrique Días López y no por estos resultados catastróficos que casi nos hacen perder el registro como partido, sino porque desde años atrás lo hemos venido diciendo, desde su llegado lo dijimos, el PRI es un partido de puertas cerradas donde solo entran el grupo de Manuel Cota, donde las candidaturas fue para beneficiar a la gente de Cota, el dinero que llegó al partido para hacer campaña se destinó únicamente para la campaña de Cota y a candidatos que ellos mismos habían impuesto andaban como loquitos porque andaban sin dinero y sin estructuras, porque todas las estructuras del partido se las llevó Manuel Cota para su campaña, le recalco tajantemente a Enrique Díaz que soy más priista que él y que yo si trabajo por el partido y no como él que no sale ni a la calle porque se insola”.

Le recordó que el tricolor es un partido plural en su ideología, por lo que pueden pensar diferentes cada uno de ellos, por lo que le dice que no se confunda y piense que solo son priistas aquellos que postean y le dicen que él es el mejor dirigente, que todo lo hace bien, se le recomienda que salga a la calle y escuche los comentarios de la gente para que vea como lo tildan, como lo califican a él y a Cota y que escuchen que es lo que dicen del PRI, pero no, prefiere la comodidad del aire acondicionado y el confort de su oficina que el asolearse y polvearse los zapatos, entones que calidad moral tiene él para hablar.

Son ellos, -refiriéndose a Cota y a Enrique Díaz- y su grupúsculo los que han llevado al PRI a las derrotas consecutivas, a la casi eminente muerte, porque han cerrado la participación de todo militante y solo para ellos sus incondicionales, sus aplaudidores y salamaneros son los que pueden decidir y ser considerados como priistas, aunque nunca antes hayan trabajado por el partido.

Concordó con el dirigente estatal del PRI, que se debe hacer una profunda limpia, pero esta debe iniciar con él mismo y con Manuel Cota, todo el comité directivo debe salir pero a la de ya, si vergüenza tuvieran ya hubieran presentado sus renuncias, pero no la tienen, no es posible que por no tener coincidencias con él  se les negó la oportunidad de participar en esta contienda electoral como lo hizo con el sector más importante y fuerte del partido como lo es la CTM.

En los municipios impuso a candidatos y repitió platos con las esposas, Enrique Díaz no buscaba ganar una elección, buscaba las plurinominales para él entrar, ero ni para eso lo quisieron, la derrota sufrida es porque además nunca en territorio unificaron estructuras de los tres partidos, cada quien trabajo solo, vergüenza le debería de dar queriendo seguir como dirigente estatal.